Pero lo del fin del mundo dió pié a algunas conversaciones sobre ovnis y paleocivilizaciones con mis amigos científicos. Una de las idéas que fué admitida por todos, fué la de que hay otros mundos habitados, que no somos los únicos beneficiarios del universo, No hubo discusión sobre eso.
Lo que si suscitó una discusión es la cuestión de si la tierra fué colonizada en épocas anteriores, lo de la historia de las tablillas sumerias... Los anunnakis... El planeta Nibiru... la biblia... y mil argumentos mas, tanto a favor como en contra.
El que me pareció mas convincente, fué el que sostenía que la existencia de una civilización prehumana quedaba sobradamente probada por la existencia del petróleo.
Ah!!!... No!!!... Que si los bosques, que si los dinosaurios enterrados.
La prueba es evidente porque el petróleo es lo que ha quedado de los inmensos vertederos de basura de una civilización que agoto el planeta.
Un bosque enterrado o una manada de dinosaurios sepultada por un alúd hubiesen dado capas estratificadas de poco grosor. Las enormes bolsas de petróleo no pueden ser mas que grandes acumulaciones de materia compuesta básicamente de carbono, es decir materia orgánica, como nuestros plásticos actuales o la piel de una patata.
Algún dia nuestro concepto de las cosas dara una vuelta de campana.
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